La recuperación está debiendo financiarse casi en su totalidad con los bolsillos de los más afectados y menos responsables de la emergencia climática.
La emergencia climática mundial ha llegado a un punto en el que es necesario poner a disposición fondos específicos en solidaridad con las víctimas menos responsables de los impactos de la emergencia climática y menos equipadas para resistirla.
Los países más ricos y contaminantes del mundo, especialmente los del G20, tienen una deuda que saldar. Son los que más contribuyen a la crisis climática. También son los principales responsables de la lenta y débil respuesta mundial para mantener el caos climático bajo control. Puedes ayudar apoyando la causa, compartiendo experiencias y soluciones sobre las pérdidas y los daños, y pidiendo que se tomen medidas urgentes.